Por: Manuel Alejandro Moreno Camacho
Intervención en el CEP 2023 ¿Cómo opera el psicoanálisis, hoy?
Febrero 16 de 2023
Preguntarnos ¿Quién analiza hoy? es cuestionar el corazón mismo de nuestra práctica. Es una pregunta que apunta a la articulación indisociable entre clínica y ética. Pero es, al mismo tiempo, una pregunta engañosa, o por lo menos de respuesta esquiva para una escuela de psicoanálisis que se sostiene a partir del agujero acerca del saber sobre ¿Qué es un analista? Ahora bien, apuntalarse en el agujero no quiere decir que hacer la pregunta esté vedado ¡Todo lo contrario! Es justamente a partir de preguntas que avanzamos, intentando respuestas, bordeando el agujero.
No es una pregunta nueva, Lacan la propone como primer apartado en su escrito: La dirección de la cura y los principios de su poder, de 1958. Es una provocación, un cuestionamiento directo al ser del analista, realizado en una conferencia preparada para responder a la invitación de la Sociedad Francesa de Psicoanálisis, en un momento en que faltaban pocos años para que aconteciera su “excomunión”. Es una pregunta lacaniana.
En el escrito la pregunta está justificada de entrada, dice Lacan: “bajo el nombre de psicoanálisis muchos se dedican a una <<reeducación emocional del paciente>>” (p. 559). Sí, reeducación emocional, esa es la expresión que acuña Lacan para tomar distancia de ella, para advertir que no es eso a lo que apunta el psicoanálisis.
Voy a tomar una deriva, para enlazar la preocupación de Lacan con la historia del desarrollo de las disciplinas psi y su participación en la genealogía de la subjetividad. La preocupación porque la práctica psicoanalítica derive en una reeducación emocional, es indicativa de la posición de Lacan en las cuestiones que conciernen a las relaciones entre el poder y la verdad. Es magnífico encontrar que en el seno mismo de la propuesta lacaniana, en un texto de 1958, el psicoanalista francés se haga preguntas que han sido formuladas principalmente desde el exterior de las disciplinas psi, desde el exterior del psicoanálisis, y que han sido articuladas principalmente como ataques para su desacreditación.
Tomarse en serio la pregunta de Lacan, la advertencia sobre el riesgo constante de derivar en una práctica de reeducación emocional se comprende mejor si atendemos al devenir de las disciplinas psi, su especialización y prolifereación en el contexto socio-político occidental, capitalista, en los siglos XX y XXI.
Nikolas Rose (1996/2019), sociólogo inglés, representante de los estudios de la gubernamentalidad, propone que
La psicología [y todos los saberes psi] […] constituye[n] un “saber-hacer”, [que] hace posible ciertos “efectos de poder”. La psicología y todos los saberes psi han jugado un papel significativo en la reorganización de las prácticas y técnicas que, durante el siglo XX, han vinculado la autoridad y la subjetividad, especialmente en las políticas liberales y democráticas.
[…] Los psicólogos, y todas las otras autoridades de los psi, juegan un papel relevante en la “operacionalización” de ideas como: la autoactualización del individuo emprendedor de su propio sí mismo, que conmina a tomar la responsabilidad sobre la propia vida, y a vivirla como si fuese el resultado de elecciones tomadas libremente. Diseñando estrategias que hacen posible gobernar a los individuos en nombre de su libertad y autorrealización. Las ciencias psi son ciencias “políticas”, es decir, ciencias que sostienen determinadas prácticas de gobierno de los individuos y las colectividades que parecen legítimas porque son veraces.
Lacan advertía esta problemática en el psicoanálisis mismo en el congreso de 1958, y extiende su reflexión a lo largo de toda su enseñanza, pasando hacia finales de la década de los 60’s por la formulación de su teoría de los discursos, en la que propondrá que el discurso psicoanalítico es aquel que inscribe un lazo social que no aspira a la dominación.
Esta actitud de Lacan fue destacada por el filósofo francés Michel Foucault, quien ha inspirado la corriente de estudios en la que se inscriben las investigaciones de Nikolas Rose. Foucault en su seminario de 1982, La hermenéutica del sujeto, destaca que:
lo que constituye todo el interés y la fuerza de los análisis de Lacan […] es que […] Lacan ha sido el único después de Freud que quiso volver a centrar la cuestión del psicoanálisis precisamente en la cuestión de las relaciones entre sujeto y verdad (p. 43-44).
Y es justamente sobre la diada poder-verdad sobre la que versa el escrito La dirección de la cura y los principios de su poder. Como indica Flory Kruger: “La acción del analista no se reduce al ejercicio de un poder […] El analista debería ser un amo que abandona ese poder tras la búsqueda de la verdad” (pp. 123-124).
Y para lograrlo, enfatiza Lacan, el primer principio clínico que deberíamos tener presente es que se dirige la cura, no se dirige a los pacientes:
El psicoanalista sin duda dirige la cura. El primer principio de esta cura, el que le deletrean en primer lugar, y que vuelve a encontrar en todas partes en su formación hasta el punto de que se impregna en él, es que no debe dirigir al paciente. La dirección de conciencia, en el sentido de guía moral que un fiel del catolicismo puede encontrar, queda aquí radicalmente excluida. (p. 560)
Para salir del impase de dirigir al paciente y entrar en el terreno de la dirección de la cura y los principios de su poder, la propuesta de Lacan se basa en estar atentos a lo que podríamos denominar los componentes del acto analítico, la arcilla en la que se sostiene lo que el psicoanálisis tiene para ofrecer: me refiero a lo que Lacan enuncia como táctica, estrategia y política. Tres formas de referirse a la interpretación, la transferencia y la posición de analista (el deseo de analista que se expresa como presencia singular en cada caso). Son asuntos que nos hemos propuesto trabajar en este ciclo de estudios en la NELcf Cali.
Entonces ¿Quién analiza hoy? es una pregunta vigente, en tiempos en los que la salud mental emerge como preocupación (o mejor diré como seudopreocupación) y las ofertas de terapia pululan como productos de mercado, como bienes de consumo. Esta proliferación de alternativas terapéuticas es un asunto de cuidado e interés cuando nuestra pregunta y nuestro título (me refiero al título con el que convocamos al Ciclo de Estudios en Psicoanálisis) incluyen la referencia al tiempo presente: hoy ¿Cómo opera el psicoanálisis, hoy? título del CEP ¿Quién analiza hoy? pregunta crítica y ética que formula Lacan en 1958 y que en 2023 tomamos para seguir bordeando el agujero.
No estamos aquí para denigrar de otras terapias o para desacreditar alternativas de tratamiento del malestar que emergen en la cultura, ese camino conduce tanto a la reeducación emocional como a la profesión de la fe buena para la salvación de las almas. El discurso psicoanalítico no anda por ese camino, en tanto no aspira a la dominación, no se trata de susurrar al oído del Amo la manera en que deben hacerse las cosas.
¿Quién analiza hoy? es una pregunta vigente para cuestionar el psicoanálisis mismo ¿Cómo participamos del horizonte de nuestra época? ¿Cuál es el destino, el uso posible, para una práctica como el psicoanálisis en el mundo actual?
Referencias
Foucault, M. (2002). La hermenéutica del sujeto. Fondo de Cultura Económica.
Kruger, F. (2017). La dirección de la cura hoy. En Cuadernos del INES 12. Instituto Nueva Escuela y Grama ediciones.
Lacan, J. (1958). La dirección de la cura y los principios de su poder. En Escritos 2. Siglo XXI Editores. pp. 559-616.
Rose, N. (2019). La invención del sí mismo. Poder, ética y subjetivación. Pólvora Editorial.
Declaración de amor…
Táctica y estrategia
Mario Benedetti
Mi táctica es
mirarte
aprender como sos
quererte como sos
mi táctica es
hablarte
y escucharte
construir con palabras
un puente indestructible
mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos
mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos
mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple
mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.
Respuesta a la demanda de amor… en la transferencia…
Deconstrucción
Manuel Moreno
Mi táctica es escucharte
aprender como sos
que seás como sos
mi táctica es hablarte
y mirarte
(o no)
resonar la palabra
como eco hacerla audible
mi táctica es
moldearme a tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con que pretexto
pero prestarme a vos
mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple
mi estrategia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
ya no me necesites.